martes, 29 de septiembre de 2009

¡NO A LOS DESPIDOS EN TyC SPORTS!

Según publicaron algunos medios gráficos el día domingo, TyC Sports anunció un recorte de personal del 30% para las primeras semanas de octubre. Pero dentro de las crónicas se detallaba que en realidad serían más de la mitad los trabajadores cesanteados.
TyC Sports amasó fortuna durante más de dos décadas gracias a la precarización laboral y la política antisindical hacia sus trabajadores. Claro que no hubiera sido posible sin la complicidad silenciosa del SATSAID.Ahora que la camarilla del fútbol privado que pagó los derechos de televisación del bolsillo de los usuarios, fue despojada por el kirchnerismo a favor de la mafia de la AFA y los clubes de fútbol bajo el rótulo de “Fútbol para Todos”, los empresarios descargan una vez más su crisis sobre el lomo de los laburantes. Aún no se vio, leyó o escuchó ni a Moyano ni a Arreceygor, secretario general del SATSAID, pronunciándose en defensa de los puestos de trabajo, como sí han abusado de los espacios para reclamar radios para los gremios y apoyar el proyecto de Ley de Comunicaciones Audiovisuales del oficialismo.

Denunciamos la vergonzosa actitud de Moyano de solidarizarse con la patronal extranjera de Kraft Food (ex Terrabusi) para atacar la organización independiente de los trabajadores.

Como señalamos en su momento el compromiso de “paz social” incluido en el último acuerdo paritario solo es utilizado contra los trabajadores mientras es pisoteado sin reparos por las empresas como ocurrió con los despidos de C5N o los despidos encubiertos en “retiros voluntarios” en América TV, Telecentro o el mismo Grupo Clarín.

Ni hablar de los contratos leoninos avalados para beneficio de las productoras de Palermo o ESPN.

Necesitamos impulsar una asamblea general de todos los trabajadores de la televisión para establecer un plan de acción contra los despidos de los compañeros de TyC Sports, que significan un banco de pruebas en todo el sector, como consecuencia de la lucha encarnizada entre los monopolios, las camarillas del poder y sus gerentes políticos por el control de los medios audiovisuales.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

¿Para qué quiere Moyano una radio si sus ataques a la huelga de Kraft salen por cadena nacional?

Ayer fue un día aleccionador para los trabajadores. El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, usó el mismo contacto con la prensa para hacer una defensa cerrada de la Ley de Radiodifusión que impulsa el Gobierno, reclamar para el Sindicato de Camioneros una radio y atacar de una manera artera la heroica huelga que llevan adelante los trabajadores de Kraft Food (ex Terrabusi) contra los más de 150 despidos impuestos por la empresa norteamericana.
Pocos días después de que la Unión Industrial pidiera públicamente la represión de los trabajadores, las críticas de Moyano a los huelguistas y al cuerpo de delegados que dirige el conflicto son una contraseña para que el plan patronal de desalojo avance.¿Esas son las posiciones que Moyano pretende canalizar mediante los espacios que consiga con la “democratización” de la comunicación que impondría la nueva ley de Servicios Audiovisuales?

¿O sólo los usará para blanquear los suculentos aportes que recibió para su sindicato de las tres últimas direcciones de la Superintendencia de Salud?

El repudio a las declaraciones criminales de Moyano contra la lucha de los compañeros ¿tendría algún espacio en el 33% que la ley prevé para las “organizaciones sin fines de lucro?La huelga, la ocupación y el piquete en defensa de los puestos de trabajo y como resultado de la movilización y la deliberación asamblearia independiente de los trabajadores constituyen una de las manifestaciones más altas y genuinas de la libertad de expresión que pueda alcanzarse en la sociedad bajo el domino patronal.

El ataque y la hostilidad del jefe mayor de los burócratas kirchneristas a todo el proceso que protagonizan los compañeros de Kraft Food desnuda en su esencia toda la patraña oficialista sobre la democratización de las comunicaciones a partir de la nueva Ley de Radiodifusión.
Naranja de Prensa