La TV analógica tiene fecha de vencimiento en el año 2010. Será entonces el comienzo de la era digital en las señales audiovisuales. En términos técnicos la televisión digital (DTV) implica, no sólo calidad e imagen óptimas para el televidente -idéntica al DVD- sino que los canales gratuitos pasarán a ser decenas en lugar de los cinco existentes, además de paquetes para comercializar. En términos tecnológicos, la señal de TV digital no sólo podrá ser recepcionada desde televisores y celulares, sino también por PC o notebooks, grabadoras de DVD, TV para autos y handhelds (palms, agendas digitales, etc.). En términos comerciales se explica como un gigantesco negocio en equipos e infraestructura, tanto para la renovación del parque de televisores, como para la modernización de los canales alrededor de los u$s 200 millones (Revista Fortuna N° 181). Por ejemplo: los receptores actuales son analógicos, entonces para posibilitar el acceso a lo digital las opciones son dos: comprar televisores nuevos que puedan decodificar la señal o usar decodificadores. Pero para ello, y como primer paso, es necesario elegir el estándar de digitalización y existen sólo tres.
De la elección de uno de ellos dependen relaciones internas y externas entre gobiernos, multinacionales y la burguesía nacional. Políticamente esto significa alianzas estratégicas, tomas y dacas, y lobby, mucho lobby. Ver recuadro en pie de página.
En octubre de 1998, mismo año en que el fondo texano Hicks, Muse, Taste & Furst ingresó en Cablevisión, Carlos Menem metió de prepo al estándar estadounidense ATSC. La alineación con la política del norte y la presión del Grupo Clarín fueron los factores determinantes. También fue cuando el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de Fernando de la Rua extendió los plazos para reconvertir las redes aéreas de las cableras en subterráneas a cambio de ayuda en la campaña presidencial. Más tarde la Alianza revisó el decreto a través de la Secretaría de Comunicaciones (Secom) pero no lo derogó. Es que para que el Estado nacional se decida por otra norma primero deberá derogar la actual lo que se traduce en una lluvia de demandas de las empresas que afirmen haber invertido tomando en cuenta el estándar vigente. Por eso Néstor Kirchner creó una "Comisión de Estudio y Análisis de los Sistemas de Televisión Digital" en donde prácticamente la única resolución que sacó hasta el momento fue la incorporación de un delfín de Julio De Vido para controlar y dirigir dicho proceso.
Un colchón de seguridad
El ciclo de reconstrucción de relaciones poder-medios que comenzó en la licuación de deudas facilitada por Eduardo Duhalde con la pesificación de 2002, pareció haber cerrado con la prolongación de licencias que Kirchner otorgó en 2005, plazos que en algunos casos estiraron las concesiones ¡hasta 2040! "Queremos los medios en manos de empresarios nacionales", dijo el presidente entonces. Pero Alberto Fernández fue más a fondo: "Les estamos permitiendo planificar a diez años más para que pongan en orden sus finanzas (…) lleven adelante su negocio y trabajen con tranquilidad". El presidente de la Asociación de Telerradiodifusoras Argentinas (ATA), Carlos Fontán Balestra, mezcló entonces la paja y el trigo: "Es muy importante para la libertad de expresión (¡¿?!). No es lo mismo saber que se tiene una prórroga de 10 años, lo que confiere estabilidad, cuando hay que salir al mundo con la programación en la era de la TV digital - se encarriló -. Y además, con este decreto, no habrá que vivir a merced del poder político, ni pedir favores" (La Nación, 21/05/05). Lo cierto es que el favor les fue otorgado: la masiva tercerización, régimen de pasantías, retiros voluntarios, despidos avalados y retrocesos en las condiciones laborales desde el SATSAID y la UTPBA junto a las bochornosas paritarias que se sucedieron, fueron, son y serán un cheque en blanco que extendió el poder político a las empresas de medios. Semejante situación de precarización es el costo que paga la clase obrera para que los patrones resulten beneficiados e incrementen el valor de las compañías.
Los coqueteos del matrimonio K.
Al no haber aún recomendación de norma, existen continuos guiños y coqueteos desde la Rosada, única arena donde se resolverá esta cuestión: la política. La decisión que tome ahora Kristina influirá sobre la televisión pública que viene, porque tanto el cable o Direct TV, son servicios no regulados cuya elección corre por cuenta de los operadores.
Los especialistas afirman que "según el mercado la norma europea tiene mejor economía de escala y es muy fuerte en televisión móvil, pero tiene puntos débiles de cara a la televisión de alta definición. ATSC, en tanto, es vista como fuerte en televisión de aire alta definición, pero tiene su pata móvil aún en desarrollo". La cámara de diputados en su conjunto ya mostró cartas al manifestar que "de las tres normas, sólo la estadounidense y la europea son viables", según la Comisión de Comunicaciones. Y va un poco más allá: "Si tuvieran similares características, la DVB es la más económica" (Revista Fortuna N° 181). De hecho, antes del traspaso presidencial del año pasado se filtró la data de que el estándar europeo sería el elegido (lapolíticaonline, 24/10/07). La elección de la norma defendida por Telefónica y algunas compañías de celulares sellaría acuerdos económicos entre el gobierno argentino y el de José Luis Rodríguez Zapatero. "Casualmente" la primera línea de Telecom y Telefónica fue recibida públicamente por CFK, en los primeros días de mandato. Cinco meses después, ante el conflicto con el campo, el número uno de la Telco española, César Alierta, estaba en la primera fila de la Casa de Gobierno aplaudiendo a la presidenta. La herida abierta cuando Telefónica mostró intención de lanzar Speedy TV a fines de 2006 y fue duramente atacada por un sector del ejecutivo y la "competencia", quedó así definitivamente curada. Aquella vez, Multicanal-Cablevisión principalmente pusieron el grito en la luna por el anuncio. Además, Julio Bárbaro, entonces presidente del Comité Federal de Radiodifusión (COMFER), amenazó a Telefónica con sacarle la licencia si seguía avanzando en ofrecer servicios de TV por Internet sin autorización. Eduardo Caride, presidente de la filial argentina de Telefónica se defendió en cuanto medio pudo aludiendo que "ellos también son monopolio, hay un proveedor por zona" (…) "No tiene mucho sentido que ellos puedan dar telefonía y nosotros no podamos dar televisión (…) De hecho, por Internet se puede ver Todo Noticias, y escuchar Radio 10 o casi cualquier emisora. Están defendiendo una ventaja que han construido" (Canal-ar.com.ar 24/08/07). El ex menemista Bárbaro "renunció" el 30 de marzo y lo reemplazó Gabriel Mariotto, hombre de confianza del Secretario de Medios, el ultra K Enrique Albistur.
Clarín y el poder, una relación histérica.
El principal impulsor de la norma norteamericana ATSC es el Grupo Clarín. La norma ya está siendo la plataforma para contenidos de prueba digital de Canal 13 desde el '98 y fue materia de discusión durante 2007 para intentar confluir junto a Colombia y Chile en un estándar común (Gacemail Nº 199). Chile ya anunció que adoptará ATSC y el gobierno de Alvaro Uribe viene dando sobradas muestras de alineamiento al régimen bushista. Por su parte, el acercamiento de Kristina a la administración norteamericana después de su discurso sobre la cuestión FARC en la Cumbre de Río sumado a la visita de David Gross, coordinador del Departamento de Estado para las Comunicaciones, en enero para discutir el régimen que adoptará la Argentina para la DTV, pueden entenderse como guiños. Antes, el embajador Earl Wayne había expuesto su inquietud a De Vido en una carta, justo después de una demostración de DVB en la rosada, la cual llegó también justo después de una demostración de ATSC en el mismo lugar.
Entre el negocio del cable y el diario, la Noble concentra más del 50% de llegada a todo nivel en materia de comunicación. Por ello no se cansan de recordar el lobby entre NEC y la cadena O´Globo de Brasil que prácticamente impuso el sistema japonés ISDB: el secretario de comunicaciones brasileño había sido mandamás de la cadena cuyos equipos de telecomunicaciones son en su totalidad de la empresa NEC.
La TV Globo tiene aproximadamente 15.000 trabajadores. Cubre el 99,2% del territorio brasileño y 99,9% de las televisiones del país. Su audiencia de los últimos 5 años está cerca del 70% (blogs.periodistadigital.com)… es decir, el mensaje del Grupo es claro: transformarse en una sólida oposición a los intereses oficiales y formar a la opinión pública en ese sentido no demandaría mayores esfuerzos. De hecho, el sugestivo título de "Gobierno vs. Campo" no resultó un facilismo, pues para el Grupo es evidente quién ataca a quién en el conflicto que al conjunto de la clase obrera nos representa una clara disputa burguesa.
Los Kirchner han manejado la relación con el Grupo Clarín milimétricamente. Pero el paro de la "puta oligarquía agropecuaria" parece haber dividido definitivamente el ya delicado vínculo. Ese "Gobierno vs. Campo" fue el disparador para que Kristina apuntara los cañones en defensa de la "puta oligarquía industrial", alma mater del modelo de superexplotación que defiende con las patotas rentadas de la "puta burocracia sindical". Carteles agitando contra el Grupo Clarín, el impulso de un Observatorio destinado a vigilar la actividad de los medios, el piquetrucho oficial Luis D'Elia boqueando en los programas del monopolio, son la avanzada. Los anchos bravos - que le quedan en la manga por si empiezan a difundirse investigaciones cajoneadas en Canal 13 o en algún escritorio de Héctor Magnetto - son las denuncias congeladas de Telefónica ante el CIADI y otra de DECOTEVE S.A. sobre la concentración que genera la fusión y la evidente irregularidad de la operación que tuvo el visto bueno de Néstor K. Por las dudas, el golpe de gracia está en el terreno de los derechos humanos: la Corte Suprema beneficia a Ernestina Herrera de Noble en la causa en la que se investigan las dos adopciones que realizó durante la dictadura militar y que tienen serias sospechas de tratarse de apropiación ilegal de menores. La misma causa tiene una denuncia por "colusión" al sostener que tres jueces de la Corte participaron de ágapes, cócteles y charlas en el Grupo Clarín (taringa.net).
Vaivenes de una crisis inevitable.
Los tiempos de definición se acortan. Indefectiblemente la elección por la norma europea o norteamericana plantea una crisis de conjunto dentro de las telecomunicaciones que deberá ser "piloteada" por el ejecutivo sin demasiado margen de maniobra. De los lobby y presiones se han establecido compromisos comerciales con final incierto tanto con las telefónicas como con el Grupo Clarín, en un contexto internacional de crisis financiera.
De dichas contradicciones solo pueden salir los Kirchner y los grupos concentrados trasladando todo el peso de la crisis al movimiento obrero con tendencias a una mayor precarización y pauperización en las condiciones de trabajo.
Allí es donde está planteada para los trabajadores una fuerte lucha en plena "era digital" interviniendo en las próximas paritarias con un programa claro: básico igual a la canasta familiar, 82% móvil de jubilación, fin de contratos basuras, tercerizaciones y pasantías, pase a planta bajo convenio de todo el personal de televisión, asambleas periódicas en los lugares de trabajo y paritarios elegidos por las bases.
¡Que la crisis la paguen ellos!
Los Kirchner han manejado la relación con el Grupo Clarín milimétricamente. Pero el paro de la "puta oligarquía agropecuaria" parece haber dividido definitivamente el ya delicado vínculo. Ese "Gobierno vs. Campo" fue el disparador para que Kristina apuntara los cañones en defensa de la "puta oligarquía industrial", alma mater del modelo de superexplotación que defiende con las patotas rentadas de la "puta burocracia sindical". Carteles agitando contra el Grupo Clarín, el impulso de un Observatorio destinado a vigilar la actividad de los medios, el piquetrucho oficial Luis D'Elia boqueando en los programas del monopolio, son la avanzada. Los anchos bravos - que le quedan en la manga por si empiezan a difundirse investigaciones cajoneadas en Canal 13 o en algún escritorio de Héctor Magnetto - son las denuncias congeladas de Telefónica ante el CIADI y otra de DECOTEVE S.A. sobre la concentración que genera la fusión y la evidente irregularidad de la operación que tuvo el visto bueno de Néstor K. Por las dudas, el golpe de gracia está en el terreno de los derechos humanos: la Corte Suprema beneficia a Ernestina Herrera de Noble en la causa en la que se investigan las dos adopciones que realizó durante la dictadura militar y que tienen serias sospechas de tratarse de apropiación ilegal de menores. La misma causa tiene una denuncia por "colusión" al sostener que tres jueces de la Corte participaron de ágapes, cócteles y charlas en el Grupo Clarín (taringa.net).
Vaivenes de una crisis inevitable.
Los tiempos de definición se acortan. Indefectiblemente la elección por la norma europea o norteamericana plantea una crisis de conjunto dentro de las telecomunicaciones que deberá ser "piloteada" por el ejecutivo sin demasiado margen de maniobra. De los lobby y presiones se han establecido compromisos comerciales con final incierto tanto con las telefónicas como con el Grupo Clarín, en un contexto internacional de crisis financiera.
De dichas contradicciones solo pueden salir los Kirchner y los grupos concentrados trasladando todo el peso de la crisis al movimiento obrero con tendencias a una mayor precarización y pauperización en las condiciones de trabajo.
Allí es donde está planteada para los trabajadores una fuerte lucha en plena "era digital" interviniendo en las próximas paritarias con un programa claro: básico igual a la canasta familiar, 82% móvil de jubilación, fin de contratos basuras, tercerizaciones y pasantías, pase a planta bajo convenio de todo el personal de televisión, asambleas periódicas en los lugares de trabajo y paritarios elegidos por las bases.
¡Que la crisis la paguen ellos!
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