viernes, 1 de enero de 2010

PONGAMOS EN PIE UNA NUEVA DIRECCIÓN CLASISTA EN LA TELEVISION

La autonomía política que ha comenzado a despuntar sobre la base de un activismo sindical joven y luchador ha puesto al gobierno de Cristina y a ambas centrales obreras, la CGT de Moyano y la CTA de Yasky, en una encerrona. ¿De qué manera enfrentar las expresiones de lucha que se extienden por todo el país y cómo lograr que dichos procesos se amolden al kirchnerismo evitando cualquier tipo de conflictividad?
El Sindicato Argentino de Televisión está de lleno metido en dicha perspectiva: lo demuestra el salario de miseria y la “paz social” por un año que negoció con las patronales de la televisión hace un par de meses atando de pies y manos a los compañeros que salen a defender sus puestos de trabajo por despidos.
Forma parte de esa estructura nefasta, podrida y burocrática que apoyada en el Estado y el gobierno nacional muele a palos a cualquier expresión de independencia política (Subte, Coto, Kraft Terrabusi, Mahle, Bosch); es parte de los escandalosos fraudes en el gremio de Aeronavegantes o en el Suteba La Plata; es expresión de un accionar mafioso enquistado dentro de las filas del movimiento que con el reaseguro del Ministerio de Trabajo (Tomada) se presenta a elecciones nacionales de gremio en completa soledad y sin ningún tipo de oposición quedándose con todos los cargos directivos como acaba de suceder recientemente.
Es la visión de corrupción, de adulteración y suministro de medicamentos “truchos” con la plata misma de los trabajadores (ver nota “Sindicato de ‘nuevas tecnologías...") ¿Cuánto tiempo falta para que Arreceygor le lleve puchos a Zanola?


En el Subte, en Kraft Terrabusi, en la huelga de autoconvocados de la salud en Tucumán, en los petroleros de Santa Cruz, en el nuevo sindicato azucarero de El Tabacal – Salta, en centenares de seccionales y cuerpos de delegados de todo el país, se expresa una etapa de transición política en el movimiento obrero que es importante señalar.

La agrupación Fibra Obrera es parte de este proceso de lucha con la perspectiva de poner en pie una nueva dirección clasista en el gremio de la Televisión con un programa claro de cara a todos los trabajadores de la TV:

La propuesta de reparto de las horas de trabajo ante cualquier tipo de despido y suspensión; el rechazo a la pasividad del SATSAID frente a los “retiros voluntarios” que ha dejado en la calle a centenares de trabajadores calificados (Telefe, América, Canal 9, C5N, Telecentro, Multicanal, etc.) que vuelven a forma parte de un plantel de agencia o contratista con convenio a la baja (UOCRA)... ¿De qué sirve “escrachar” a la contratista Groselli si al mismo tiempo se permite el desguace de trabajadores de planta en todas las empresas del ramo?
Este tipo de cuestiones merece un debate en asamblea en todas las empresas, un plan de lucha del conjunto de los trabajadores de la televisión y no de medidas aisladas que están más ligadas a “demostrar” que se lucha, que a resolver el problema de avance de las tercerizadas.
Otro punto a considerar es la actualización de ambos CCT discutidos en asamblea y la unificación paritaria de ambos convenios.
Si el avance tecnológico no es acompañado por una actualización de los convenios de trabajo, este se traduce en flexibilización laboral en beneficio de las patronales. El Satsaid durante años viene haciendo la vista gorda permitiendo la multifunción, la eliminación de funciones altamente calificadas en el ramo (por ejemplo, tareas de editor), el pago de salarios por debajo de la categoría correspondiente y avalando la superposición de tareas enfrentando a trabajadores en desmedro de la organización sindical.
La división que se establece entre los trabajadores de las cableras y los canales, productoras y estudios de televisión es completamente funcional a los intereses patronales. Tanto De Narváez, Ernestina Noble, Alberto Pierri, Marcelo Tinelli, Diego Gvirtz, etc. llenan sus bolsillos sobre la base de todas las prerrogativas antes mencionadas.
A ellas hay que sumarle en la actualidad el no reconocimiento de un “plus salarial por manejo” para todos los choferes de móviles que exponen diariamente su licencia de conducir (ley Macri, quita de puntos), el no reconocimiento de un “plus por telefonía” al reparar una red que brinda dicho servicio y la no distribución de elementos de seguridad e higiene en tiempo y forma para todo el personal que realiza tareas con riesgo físico (trabajos en altura, etc.).
Ese es nuestro programa y te invitamos a reforzar esta perspectiva; en ella está el futuro de una nueva generación trabajadora. Por una nueva dirección clasista en el sindicato de la televisión.

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